Historia de los Agustinos VII

CAPITULO VII
EXTENSION DEL TERRENO PROPIO DEL SANTUARIO. LA BALSA
La Fuente del Chopo debería tener mucha agua, agua en abundancia para regar el huerto que circundaba el Santuario y todavía sobraba para enviar a Elda. Pero ¿que extensión tenia el huerto? Ni en inventario de propiedades, ni inventario alguno de los varios que hicieron los Agustinos, consta las tahúllas de que se componía el extenso huerto, que debía ser muy grande, ya que los frailes plantaban toda clase de verduras para su extensa Comunidad hay épocas que la Comunidad la componen trece religiosos y ademas plantarían toda clase de forraje para mantener los rebaños lanar, cabrío, vacuno y porcino que poseían y pastaban por aquellos alrededores.
Solamente en la sesión celebrada por el Ayuntamiento, el día 2 de Marzo de 1692, vemos la curiosidad de los Agustinos por conocer definitivamente la extensión de su huerto “Víose en este Cabildo un Memorial del muy Reverendo Padre Fray Luis de la Concepción, Prior del Convento de Nuestra Señora de las Virtudes, de cuya Santa Casa es Patrono esta ciudad, y dice que como al tiempo que está ciudad entregó y dio a la dicha Casa, todas las tierras, anegas a ella y porque no están señaladas, ni hitadas, pide a esta ciudad, que señalen e hiten, de suerte que se sepa las tierras y huerto que tiene este Convento, Visto el dicho memorial acordó esta ciudad y nombró por sus comisarios con poder y facultad bastante a los señores don Alonso Miño Valterra y a don Francisco Cervera, para que pasen a dicho Convento, llevando consigo a los veedores que tiene esta ciudad y a personas expertas, para que hiten dichas tierras"
Nada se hizo constar sobre esta operación y seguimos sin saber la extensión del huerto y las tierras que circundaban el convento.
El Concejo de Villena se entiende con el de Elda y llegan a un acuerdo y Villena envia el agua sobrante de la Fuente del Chopo a dicha ciudad, pero al cabo del tiempo crea un serio problema, fue el siguiente “Viose en este Cabildo una Real Provisión de su Majestad. y Señores de su Real Consejo de Castilla ganada de pedimento de los licenciados Pedro Miño Domeñe, don Francisco Oliver y Bravo, don Alonso Miño, y Domenech, Caballero de la Orden de Santiago, Francisco Gasque, don Ginés Oliver y Bravo, y otros consortes vecinos de esta ciudad y herederos de las partidas del Zaricejo, Carboneras y Fuen-negra, en que se Manda a esta ciudad informe en razón de la presentación que los susodichos sostienen del agua de Nuestra Señora de las Virtudes para las dichas partidas, para que en ellas se goce del beneficio del riego; la ciudad mandó que se cumpla con lo que su Majestad manda y se haga el dicho informe, declarando en él, las escrituras que esta ciudad tiene con la villa de Elda .(28)
El agua se está mandando a Elda muchos años, pero ahora los vecinos de estas partidas, cercanas a la Fuente del Chopo, necesitan el agua para as tierras y acuden al Rey.
Otro problema había de crear a los religiosos el envió del agua a Elda “ Asimismo se acordó, que se haga un estanque grande en el huerto del Convento de Nuestra Señora de las Virtudes, para lo cual se tome del dicho huerto lo que sea necesario y se comete a Cebrián 0liver y a Pedro Oliver, regidores, para que tengan el cuidado que conviene y gasten el dinero que sea necesario y en el cual estanque haya dosel, traigan maestros anivelados; y ver si del estanque puede hacerse un Molino de agua." (29).
Al transcurrir del tiempo es cuando se produce el gran disgusto de los religiosos, por un hecho inusitado y lamentable .Unos desaprensivos vecinos de Elda, a los que hoy llamaríamos "gamberros" posiblemente amparados en la nocturnidad vinieron al Convento y destruyeron el estanque o balsa que el Ayuntamiento con tanto amor y deseo, había construido a los frailes. “Hizo sé razón en este Cabildo de por cuanto se ha tenido noticia de que algunos vecinos de Elda han rompido una balsa donde los frailes que asisten al Convento de Nuestra Señora de las Virtudes tenían algún regazo y vía de importancia para la salud de los que allí asisten; pareciéndoles a los vecinos de la dicha villa les era inconveniente, para que les fuera el agua de riego que en ella usan y por eso hicieron el dicho rompimiento y como constó de no serles de perjuicio alguno, se acuerda que se vuelva a hacer la dicha balsa en la forma que estaba y se de noticia al Conde de Elda se sirva de mandar que no se innove lo que tanto tiempo está asentado y es de costumbre que los religiosos de aquel Convento gocen de esto sin riego ni inconveniente alguno y para que su Señoría, como tan devota de esta santa Casa, lo disponga en la forma que mas convenga y para que esto venga a noticia de todos, mandó esta ciudad que se publique y que so pena de cincuenta mil maravedís para la Real Cámara y el gasto que se hiciese en dicha balsa, ninguno sea osado de romperla y asimismo que nadie pueda pescar en dicha balsa, sin licencia de esta ciudad y consentimiento del Prior del dicho Convento, so pena de dos mil maravedís y así lo acordó esta ciudad y lo firma."

No hay comentarios:

Publicar un comentario